El trastorno de alimentación selectiva, también conocido como trastorno de evitación/restricción de la ingesta de alimentos, es una condición en la que una persona evita ciertos alimentos o grupos de alimentos debido a aversiones sensoriales, preocupaciones por la digestión o experiencias traumáticas relacionadas con la alimentación.
¿Cuáles son sus síntomas?
Los síntomas pueden incluir:
Evitar ciertos tipos de alimentos debido a la textura, el olor, el sabor o el color.
Ansiedad extrema o angustia al enfrentarse a ciertos alimentos.
Pérdida significativa de peso o falta de crecimiento en niños.
Dependencia de suplementos nutricionales o alimentos específicos.
Dificultades para comer en entornos sociales.
¿Cuáles son sus tratamientos?
Los tratamientos pueden incluir:
Terapia cognitivo-conductual (TCC): Abordar los pensamientos y comportamientos relacionados con la alimentación.
Terapia ocupacional: Ayuda a mejorar la tolerancia a ciertas texturas de alimentos.
Terapia familiar: Abordar dinámicas familiares que puedan contribuir al trastorno.
Consultas con un nutricionista: Desarrollar un plan de alimentación equilibrado y mejorar la variedad de alimentos consumidos.
En casos graves, hospitalización: para estabilizar el estado nutricional y abordar problemas médicos asociados.